jueves, 19 de enero de 2012
EL ESCONDITE
Y no intentes escabullirte, que no te va a servir de nada. Estás cosida a mis pies, te guste o no. Aunque te escondas detrás de mí, te puedo descubrir. Voy a contar hasta diez y miraré la acera de baldosas amarillas. Te prometo que no separaré mi espalda de esta pared oscura, pero después te voy a encontrar, cuando me asome por la esquina de este cruce. Uno, dos, tres...¡no puedes correr sola!...cuatro, cinco, seis, siete...¿estás preparada?...ocho, nueve ¡y diez!. ¡He visto tu cabeza negra! Solo he mirado un segundo, pero te he visto, justo delante de mí, larga, tendida en el suelo. Te lo dije. Siempre gano yo. Eres demasiado insolente. Y después de todo, vas a morir conmigo. En la sombra.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Me encanta la manera poética y original con la que te enfrentaste al reto de seguir adelante con la frase... Una frase que llevaba a cosas más tópicas que supiste evitar... ¡Bien hecho! Dominique
ResponderEliminarGracias DOmi. Ni los envío. Juego sola...beso!
ResponderEliminarMuy bueno. Un punto de vista diferente.
ResponderEliminarMe gusta: ...cosida a mis pies..."
Gracias Coque. Me alegra que te haya gustado!
ResponderEliminar